Las ciudades de acogida y la sociedad civil son las protagonistas de la nueva política migratoria de Brasil
Los días 9 y 10 de noviembre de 2023, Brasil presentará en Brasilia su nueva política migratoria, la Política Nacional de Migración, Refugio y Apatridia (PNMRA) que tiene como base principal, entre otras, la puesta en marcha de una red nacional de ciudades de acogida que permitirá al Estado federal dar apoyo a los municipios en sus procesos de acogida. La Organización para una Ciudadanía Universal (OCU) y su miembro latinoamericano Red sin Fronteras (RSF), que también defiende la idea de una gobernanza alternativa de la migración basada en una alianza sostenible entre las autoridades locales y la sociedad civil, participarán en debates junto a otras organizaciones como ANVITA, Ciudades y Gobiernos Locales Unidos, la Organización Internacional del Trabajo y la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados.
Esta nueva política nacional marca un verdadero punto de inflexión, habida cuenta del legado que los gobiernos anteriores dejaron en cuanto a gestión de la migración. Cuando Bolsonaro llegó al poder en 2019, endureció mucho la política de inmigración y acogida de Brasil, introduciendo mecanismos legales para restringir aún más la entrada y regularización de personas migrantes en el país. Durante la pandemia de COVID-19, el gobierno federal emitió más de 30 directivas para restringir la entrada al país, algunas de las cuales eran abiertamente discriminatorias*. Este mandato presidencial se caracterizó por el racismo sistemático y la xenofobia institucional.
Tras cuatro años de política basada en la violencia y la discriminación, Jair Bolsonaro deja a su sucesor Lula da Silva, elegido hace apenas un año, un país con una sociedad profundamente fracturada, incluso y especialmente en materia de inmigración. El departamento de migraciones del Ministerio de Justicia de Brasil, dirigido por Tatyana Friedrich y Paulo Illes, anteriormente empleado de la OCU y miembro fundador de RSF, trabaja desde hace varios meses en un nuevo proyecto de política migratoria en colaboración con la sociedad civil y las autoridades locales, basado en el modelo de São Paulo.
Firmemente convencido de que es posible gestionar las migraciones de otra manera, Illes ha colaborado con la OCU y lidera ahora el proyecto de una red de ciudades de acogida en el marco de esta nueva política. El objetivo es construir un frente común de territorios ciudadanos de acogida de personas migrantes basado en el respeto de los derechos y el diálogo con todos los actores locales implicados. Desde febrero de 2023, se ha consultado a más de 200 organizaciones de la sociedad civil y grupos o representantes de personas migrantes con el fin de elaborar esta política nacional, una práctica difícil de imaginar en otros países democráticos.
Entre los principios que rigen esta red se encuentran la responsabilidad de los municipios y el reconocimiento de su papel central en la defensa de los derechos de las personas migrantes, la necesidad de mejorar el acceso a los servicios públicos de estas personas, especialmente de las más vulnerables, y el reconocimiento del papel de las personas migrantes en el desarrollo económico y sociocultural del país.
Photo Mariana Heinz – flickr
