Libertad de circulación

"Por una libertad global de movimiento y residencia de las personas"

Paulo Illes, antiguo miembro del departamento de derechos humanos de la ciudad de Sao Paulo durante la administración Haddad (2010-2015), hoy es portavoz de la Organización por una Ciudadanía Universal (O.C.U.) en representación de los países del Sur de Europa, y vive en Lisboa. Comparte con nosotros los valores y el trabajo realizado por la OCU a nivel europeo.

La pandemia ha aumentado las desigualdades sociales. Las poblaciones más excluidas, como las personas en exilio, son las más vulnerables a sus consecuencias, pero siguen a menudo invisibilizadas, en el ángulo muerto del derecho y de la protección estatal. Es imperativo pensar soluciones concretas de protección de los derechos fundamentales de los miles de personas que viven en condiciones inhumanas en la calle o en viviendas precarias y superpobladas, sin trabajo o condiciones dignas de trabajo, y que corren el riesgo de hundirse aún más en la miseria con la crisis.

Por una Alianza Migración cada vez más fuerte

La O.C.U. participó de un esfuerzo de colaboración entre diferentes territorios en el marco del proyecto de la Alianza Migraciones. De esta manera, fue posible recoger algunos ejemplos de cómo algunas ciudades en Europa han encontrado soluciones alternativas para la integración de las personas migrantes gracias a una colaboración con la sociedad civil.
En Lisboa se ha creado una red de solidaridad con las juntas de vecinos para la entrega de alimentos y medicamentos, así como el registro de una red de voluntarios para comunicación en diferentes idiomas, entre otras iniciativas. La ciudad también ha presionado al gobierno central para regularizar a las personas irregulares frente a la pandemia. En Barcelona, España, el Servicio de Atención a Inmigrantes, Emigrantes y Refugiados (SAIER) permitió identificar a unas 300 personas migrantes, en su mayoría en situación administrativa irregular, que tienen formación sanitaria y podrían estar trabajando en hospitales y residencias de ancianos y exigir a la administración que homologue los títulos de estas personas para responder a la carencia de trabajadores en estos sectores. Son experiencias muy importantes, aunque muy condicionadas y provisionales, pero que abren la puerta a políticas alternativas y demuestran la importancia de las alianzas entre autoridades locales y sociedad civil para construir otros posibles.

Por un Foro Europeo de las Migraciones

Con el fin de construir otro mañana a nivel regional, ante una Europa que cierra y externaliza cada vez más las fronteras y criminaliza las solidaridades, la O.C.U se une a la llamada de los movimientos sociales de Europa para la construcción del primer Foro Social Europeo de las Migraciones. Previsto en marzo 2021, será un espacio importante de análisis colectivo y de fortalecimiento de la red europea de solidaridad con las personas migrantes.


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